¿Por viajar a Ushuaia y ya pensando en navegar por el Canal Beagle? ¡Hacés bien! La navegación por el Beagle es, para mi, un imperdible en una primera visita al fin del mundo, y por eso acá te voy a contar toda la info y mi experiencia personal al navegar el gran canal.
Pensar en viajar a Ushuaia nos lleva a varios pensamientos muy rápidos: frío, fin del mundo, el faro, pingüinos, y para los más conocedores de la geografía fueguina: lagunas, glaciares y montañas.
También en que no se deben perder mi guía para viajar a Ushuaia porque es muuuy completa y está chequeada por guías locales (yo que vos la leería).
Y son justamente los dos últimos, el faro y los pingüinos, algunas de las atracciones que uno va a poder disfrutar si se sube a un catamarán y sale a navegar por el Canal Beagle.
Hacerlo es muy sencillo y hay mucha oferta, imaginen (en una época normal sin pandemia de por medio) la cantidad de turistas de todo el mundo que llegan hasta este punto del mundo y quieren subirse a un barco para fotografiarse con el famoso Faro Les Éclaireurs, o llegar hasta la Isla Martillo, más conocida como la Pingüinera (no hace falta aclarar que hay en esa isla).
Navegar por el Canal Beagle
Empecemos por el principio: ¿Dónde compro mi ticket? Como dije antes, es muy sencillo, junto al puerto y frente al Canal Beagle van a encontrar una zona muy linda y colorida donde se encuentran las distintas compañías que realizan esta excursión.
Ahí entre todas esas oficinas también van a poder encontrar el famoso cartel lleno de stickers y calcomanías que confirma donde están: en Ushuaia, ciudad sinónimo de "el fin del mundo".
¿Qué compañía elegir? La verdad que hay muchas y el precio está unificado, por lo que no se trata de elegir el mejor precio. Yo lo hice con Tolkeyen, una empresa conocida y que también opera en otros lugares del país, y puedo recomendarla sin problemas.
¿Qué costo tiene navegar por el canal? Existen 2 excursiones, conocidas como la corta y la larga. Esta última, la que hice yo, es la que llega hasta la Isla Martillo (la Pingüinera), y toma algunas horas más ya que requiere de navegar bastante más lejos para llegar a estos pequeños animalitos.
La corta, por otro lado, es igual que la larga, solo que no llega hasta la Pingüinera: hace Isla de los Lobos e Isla de Los Pájaros (Cormoranes Magallánicos y Cormoranes Imperiales), sigue hasta el Faro Les Éclaireurs y pega la vuelta hacia Ushuaia.
Navegación larga: $5700.-/ persona | $2850.- menores.
Navegación corta: $3700.-/ persona | $1850.- menores.
Tener en cuenta que la navegación larga se realiza solo dentro de los meses de Octubre y Abril aproximadamente, por una cuestión climática, por lo que si vas en otoño/invierno a Ushuaia, solo vas a poder hacer la corta hasta el faro.
Si escuchaste por ahí que se puede bajar a Isla Martillo, si, es cierto. Si bien actualmente por la pandemia no se está realizando, se hacía una salida con grupos reducidos que realizan el mismo recorrido que todos, pero previo a Isla Martillo frenan en la zona de Estancia Harberton, cambian el barco por un gomón y se dirigen a la isla, donde descienden y realizan una caminata por la zona para ver los pingüinos bien de cerca.
Este lugar es una zona protegida y esta controlada.
Ya que debido a la pandemia este barco no esta funcionando, lo que se está haciendo es realizar todo el recorrido hasta Estancia Harberton por tierra (misma ruta J que va para Puerto Almanza, solo que al llegar al Canal Beagle se va hacia la izquierda y no hacia la derecha para Almanza), y desde ahí se suben a estos gomones de a 20 personas para visitar Isla Martillo a pie y compartir un ratito con los pingüinos. Averigüen bien como pueden hacerlo si les interesa.
Isla de los Lobos e Isla de los Pájaros
Como mencione más arriba, estos dos islotes son las primeras paradas del recorrido. Y siendo sincero como debo serlo, no son nada del otro mundo. Lobos marinos se pueden ver en muchos lados y no están más que desplomados sobre las rocas.
La de los pájaros toma más relevancia si te gustan las aves y con una buena cámara quizás puedas tomar buenas fotos, pero para mi eran simplemente paradas obligadas pero sin llamarme demasiado la atención.
Faro Les Éclaireurs
Ahora si esto va tomando color... A conocerlo vinimos, ¿no? el famoso faro a rayas blanco y rojo si que es uno de los platos fuertes, quizás el más fuerte, porque lo viste (lo vimos) en miles de fotos, postales, revistas y todo tipo de publicidad sobre Ushuaia.
Yo lo conocí en el veranito fueguino, pero verlo lleno de nieve por todos lados debe ser un espectáculo que paga el frío que se debe pasar en la cubierta del catamarán.
Su nombre en español significa "Los Exploradores", y fue construido allá por 1918/1919, entrando en servicio el 23 de diciembre de 1920. Lleva funcionando ya más de 100 años, porque si, sigue funcionando, aunque de forma automática, abasteciéndose con paneles solares y siendo controlado a la distancia.
Mide solo 11mts, pero gracias a la altura del islote, la luz funciona a 22.5mts sobre el nivel del mar.
Se lo suele llamar erróneamente "faro del fin del mundo", aunque el dueño de ese apodo es el Faro de San Juan de Salvamento, que se encuentra mucho más alejado, ya fuera del canal sobre el océano Atlántico en la Isla de los Estados, y es el faro más antiguo del país, construido en el 1884.
Isla Martillo / La Pingüinera
Si elegiste hacer el recorrido corto, después del faro pegan media y vuelta y directo al puerto de Ushuaia. Si como yo preferiste hacer la completa, después del faro ponete cómodo y prepará el mate (o también podés usar el bar/cafetería del barco) porque desde el faro hasta Isla Martillo hay un buen tramo de navegación.
Pero atentos, no vaya a ser cosa que aparezcan ballenas y vos estés durmiendo una siesta. Si, claro que es posible, tuve (tuvimos) la suerte de encontrarnos con ellas volviendo hacia Ushuaia y que pasen delante nuestro, pero a la ida también logramos ver algunas colas por ahí hundiéndose.
En fin, una vez se llega a la Pingüinera el barco se acerca lo más posible a la orilla, prácticamente sobre ella, para que puedas ver los pingüinitos lo más cerca posible.
No te hagas problema que ellos no le tienen ni un poco de miedo y se quedan relajados tal cual los ves ya a la distancia, algunos entran y salen del agua, otros echados al sol, y otros de acá para allá con su andar tan particular.
Como conté más arriba, la posibilidad de caminar por la isla y verlos bien de cerca está, y si bien no conozco los costos, creo que es una idea para considerar y averiguar una vez allá.
¡Les dejo un videito que hice sobre la excursión completa!
Luego de la Pingüinera el barco pega media vuelta y encara directamente hacia el puerto de Ushuaia, ahí finaliza la navegación por el Canal Beagle.
Para mi vale la pena hacer la larga hasta Isla Martillo, más allá de que no se baje a la isla se los ve muy bien y la navegación por el Canal se disfruta (sobre todo si el clima ayuda con un día soleado como me tocó a mi).
Recuerden no dejar de leer la guía para viajar a Ushuaia que de verdad es completísima, o el post sobre el inflatable tema del clima y la mejor época para viajar a Ushuaia.
Además, si piensan hacer el trek a Laguna Esmeralda, tengo un post dedicado a ese paseo.
Espero disfruten de su navegación por el Canal Beagle tanto como yo. A la vuelta algo calentito y algo rico para comer son un gran final ;).
Si te gustó, sirvió, o si te gustaría ayudarme, compartilo con tus conocidos o en tus redes.
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